La investigación de la UCO ha desvelado que una serie de inspectores de Hacienda había creado una trama corrupta junto con algunas asesorías fiscales para beneficiarse económicamente de las sanciones que imponían sin motivo justificado.
Un vez puestas las sanciones los inspectores de Hacienda implicados recomendaban a las empresas sancionadas que acudieran a determinadas asesorías fiscales en dónde les podrían ayudar a regularizar su situación con la Agencia Tributaria. En estas asesorías investigadas trabajaban inspectores de Hacienda en situación de excedencia.
Posteriormente los beneficios que recibían esas asesorías fiscales se repartían con los inspectores de hacienda en activo que formaban la trama corrupta.
Esta operación ha sido desarrollada por efectivos de la UCO de Madrid y de la Agencia Tributaria en la cual han sido detenidas 20 personas, la mayoría inspectores de Hacienda y algún empresario, a quienes se les imputa delitos de cohecho y tráfico de influencias, entre otros delitos.
El juzgado que dirige la investigación ha decretado el secreto de las actuaciones.
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